Pequeñas grandes historias

A lo largo de algún viaje pasamos por muchos lugares, algunos muy bonitos y otros no tanto, lo interesante de esto es que sin proponértelo puedes conocer historias extraordinarias, en mi caso eso fue lo que me sucedió cuando me dirigía a una zona arqueológica “la Ruta Puuc” con mis compañeros de clase.

Pasando de poblado a poblado por alguna razón teníamos que parar en alguno, lo increíble es que cada vez que nos bajamos del autobús nos topábamos con un mundo nuevo por descubrir. 

La comunidad de Maní fue uno de estos lugares, por cierto Maní significa "Lugar donde todo pasó". Maní es un bonito poblado lleno de tradición y cultura, donde sucedieron hallazgos muy importante para la historia de Yucatán, pero sobre todo para la historia de los mayas.

Visitamos el ex convento de San Miguel Arcángel, lo interesante de este ex convento fue lo que sucedió en la explanada, unos lo llaman “El auto de fe que sepultó a la cultura maya”; Fray Diego de Landa ordeno quemar y destruir documentos y códices mayas para convertir al pueblo indígena al cristianismo.

Estar parado en el mismo lugar donde sucedió todo esto y que en ese mismo instante te digan “Donde estas parado sucedió” fue una experiencia enriquecedora. Estoy seguro que Fray Diego de Landa no tenía ni idea de lo que realmente estaba haciendo en ese momento, me consuela saber que se arrepintió e intento rescatar algunas cosas, así como también tiempo después se dedicó al estudio de la cultura maya.

Otro poblado que valió la pena visitar en el trascurso del viaje fue el poblado de Santa Elena, ahí vistamos la iglesia de San Mateo pero eso no fue todo, a un costado de la iglesia se encuentran "las momias de Santa Elena"

en este sitio se pueden apreciar los cuerpos de cuatro momias que conservan sus uñas y cabellos, Los cuatro cuerpos corresponden a niñas, cuyas edades están entre los tres y seis años, visten ropa de algodón blanco con flores de color rosa, amarillo y azul, así como calcetines y gorros. 

Estos cuerpos fueron descubiertos cuando hicieron algunas obras en el piso de la iglesia,  se encontraron 12 ataúdes, lo más interesante es que la momificación se dio de manera natural. 

Este acontecimiento nos deja claro las costumbres funerarias de la antigua cultura maya.

Asi que ya saben, Mani y Santa Elena están de paso rumbo a la Ruta Puuc, si están por estos rumbos no duden en visitar estos dos poblados. Tienen mucho que ofrecer.